La cajita

"Una piedra para cada persona"

Tenemos vocación de ayudar, mucha veces lo quiera la gente o no, es nuestra pequeña tara o virtud según se quiera mirar. De ahí nos surge este atrevimiento de inmiscuirnos en vuestra vida, así sin llamar ni nada, para encima «arreglárosla». Como si lo necesitarais…  

Dicho esto, no nos lo tengáis en cuenta y seguir queriéndonos un poco, porque de verdad que esto lo hacemos porque os queremos un montón. 🙂

Sí, sí, que muy bien todo eso, pero en la cajita ¿Qué hay? Dos piedras. ¿Así sin más? os preguntareis y con buen criterio hasta podréis pensar que menudo regalo que han preparado estas dos. Tranquilos, el ecologismo no se nos ha ido de las manos

En efecto hay dos piedras, pero creernos, son muy especiales y están elegidas especialmente para cada uno de vosotros. Personales e intransferibles. 

La piedra que hay en la bolsa ha sido elegida para que os ayude en vuestra vida y en el pergamino (mini) que hay en la caja os explicará qué tipo de piedra es y para qué sirve. También hay un cono de incienso que se usa para «limpiar» la piedra de energías que tenga impregnada. Lo que deberéis hacer, cuando creáis conveniente, es encender el incienso y dejar la piedra al lado. Esto es importante porque una vez la piedra esté limpia lo siguiente que toque será a vosotros y ya crearéis un vínculo energético único con ella.

La otra piedra que está en la caja, pintada del mismo color que vuestra piedra energética, tendréis que usarla para un viaje muy especial. Así que seguir leyendo para descubrirlo…

“La mejor forma de ocultar algo es dejarlo a la vista de todos”

Así lo sabían los iniciados del pasado, desde templarios a cabalistas, pasando por eruditos cristianos que camuflaron su doctrina secreta en juegos y cuentos populares.

En la rayuela, los niños deben tirar una piedra (el alma) y avanzar de casilla en casilla, de estado en estado. Como bien lo relata Julio Cortazar en su famosa novela del mismo nombre sobre este juego:

“Ingredientes: una acera, una piedrita, un zapato, y un bello dibujo con tiza, preferentemente de colores. En lo alto está el Cielo, abajo está la Tierra, es muy difícil llegar con la piedrita al Cielo, casi siempre se calcula mal y la piedra sale del dibujo. Poco a poco, sin embargo, se va adquiriendo la habilidad necesaria para salvar las diferentes casillas y un día se aprende a salir de la Tierra y remontar la piedrita hasta el Cielo, hasta entrar en el Cielo”

Aunque se puede fechar la rayuela en la antigüedad remota, lo cierto es que hasta el renacimiento no tenemos constancia escrita del juego. Inspirado directamente en “La Divina Comedia” de Dante Alleghieri, que como sabemos, y si no lo sabes, aquí estamos para contártelo, va sobre un viaje desde el infierno hasta el cielo buscando al amor de su vida. Viaje en el cual pasará por diferentes estados o pruebas, entre ellas el purgatorio.
La rayuela es un eje, un trazado bidimensional que une los tres mundos conocidos, o de los que nos han hablado en todas las creencias y religiones: el mundo subterráneo (inframundo), la tierra y el cielo.

¿Y qué personaje nos cuentan las leyendas que es capaz de viajar por estos tres mundos? Nada más y nada menos que Hermes Trimegistro, el tres veces grande, poseedor de las llaves de los tres mundos. Así que ya sea en la forma de Dante o de Hermes, te invitamos a que pongas a prueba tu alma (y tu destreza) para conseguir el cielo.

back to top